El II Simposio Teológico Misionero Internacional que se llevó a cabo del 28 de febrero al 2 de marzo, en Uruguay, actividad rumbo al V Congreso Americano Misionero a realizarse en Santa Cruz, el año 2018, tuvo una participación de alrededor de 100 personas provenientes de norte, sur y centro América, representantes de 24 países. Limbert Ayarde, Secretario Ejecutivo del área de Educación de la CEB, quien coordinó el foro Misión y Educación, señaló que los participantes salieron satisfechos, y se cumplió todo como estaba planificado y felicitó a las comisiones: metodológica, y teológica por su desprendimiento en el arduo trabajo que se realizó en este simposio.
El II simposio que ha tenido el lema: “El Evangelio de la Alegría impulsa la misión” se ha desarrollado en diócesis de Canelones, en Uruguay, y Mons. Alberto Sanguineti recibió a las delegaciones participantes como anfitrión, obispo de la diócesis de Canelones.
Impacto de los participantes por conectarlos con la realidad uruguaya
Limbert Ayarde, en entrevista exclusiva con Bolivia Misionera, comentó la satisfacción de las delegaciones participantes del evento no solo por la profundidad y riqueza fruto de las reflexiones, sino también por conectarlos con la realidad que se vive en la actualidad en Urtuguay al albergarlos en casa de familia y señaló al respecto: “Esto ha generado un gran impacto en los participantes. Algo que han recalcado los participantes fue la posibilidad que ha dado la iglesia uruguaya de dar conocer su realidad de base”.
“Uruguay está marcado donde predomina un estado laico que marca la vida de la sociedad civil en Uruguay es donde ahí la iglesia misiona, hace su trabajo de anunciar a Señor Jesucristo y en estas familias henos podido compartir, hablar de la fe, hablar de la Iglesia, de la vida en la comunidad para poder percibir cómo la iglesia evangeliza en este territorio oriental”, señaló Ayarde.
Al mismo tiempo, Limbert Ayarde, señaló “resalto también el trabajo realizado por la comisión teológica que mostró gran desprendimiento y trabajaron hasta altas horas de la madrugada que sistematizaron el trabajo realizado han recogido la iluminación bíblica y han organizado un itinerario de reflexión bíblica teológica donde primero se planteó la pregunta ¿No ardía acaso nuestro corazón mientras el Señor nos hablaba en el camino?” que fue el primer momento de reflexión que se dio en el evento.
Un segundo momento, fue el de reconocer que los hombres somos duros de entendimiento en base a la pregunta ¿cómo les cuesta creer todo lo que anunciaron los profetas?
También recalcó, Ayarde, que en la parte proyectiva hubo una sintonía plena de los participantes en mostrar que la puesta misionera en el continente tiene que ser a nivel local “la parroquia es la iglesia concreta y es donde los fieles tenemos que estar organizados para llevar esta buena nueva que hace arder el corazón. El espíritu motiva a que uno la quiera compartir y llevar a otros y ese anuncio tiene que ser con el prójimo, con el que está a lado, allá debe ser donde nosotros debemos nuestra misión evangelizadora”, señaló.
Foto: Foto oficial del evento Limbert Ayarde
Fuente: Bolivia Misionera